Llevábamos tiempo soñando con poder ver dos de las montañas más espectaculares de Europa situadas en los Alpes. El Cervino, o Matterhorm en alemán y el famoso Mont Blanc ¿Quién no ha soñado alguna vez con tocar el cielo en las montañas más altas de la Europa continental? Hoy os contamos nuestra experiencia en el teleférico del Mont Blanc.
Existen varias opciones de rutas para disfrutar de este espectáculo de la naturaleza. Sin embargo, estamos en un blog low cost, por eso os vamos a explicar la forma más barata de hacerlo: Accediendo desde el lado italiano. Una opción menos conocida que desde Suiza o Francia, pero mucho más económica, ya que en los países vecinos se encarecen bastante las excursiones y transportes.
Nosotros volamos al aeropuerto de Turín desde Barcelona, allí alquilamos un coche y en unos 30km ya estábamos sumergidos en el Valle de Aosta. La puerta de entrada a la zona noroeste de los Alpes italianos.
Para nuestra estancia, elegimos alojarnos en el Village Camping Cervino, sobre todo por su ubicación. Al encontrarse a unos 20km del Cervino y unos 70km del Mont Blanc, nos permitió visitar ambas montañas con gran facilidad. Pero del camping ya os hablaremos más adelante. Ahora os contaremos los puntos más importantes a tener en cuenta para visitar el teleférico de Mont Blanc.
¿Cómo llegar al teleférico de Mont Blanc?
Para llegar hasta el teleférico del Mont Blanc «Skyway MontBlanc» hay que conducir por la carretera que une Italia con Francia hasta llegar a la frontera. Aquí se encuentra el famoso túnel del Mont Blanc, un túnel de los años 60 y 11 kms de longitud, que cuesta más 50€ atravesarlo.
Lo bueno es que nos vamos a ahorrar el peaje porque nos quedaremos en Entrèves, el último pueblo italiano justo antes de cruzar el túnel. Esta pequeña villa está justo al lado de Courmayeur, un municipio más grande que es el que tendréis que seguir en las señales de tráfico.
Se puede ir por autovía de peaje, pero nosotros recomendamos la carretera secundaria que pasa por la ciudad de Aosta, ya que ofrece unas vistas panorámicas del entorno alpino que te dejarán con la boca abierta.
Esta ruta discurre a lo largo de un valle que ronda los 1.000 metros de altitud rodeado por picos que superan fácilmente los 3.000 metros. Como os podréis imaginar, las cumbres suelen tener hielo casi todo el año. De hecho, nosotros viajamos a final de octubre y muchas crestas ya estaban repletas de nieve fresca. En resumen, la ruta en carretera hasta llegar al teleférico de Mont Blanc es toda una maravilla.
Si no tenéis coche o decidís visitar el teleférico del Mont Blanc desde la ciudad de Turín, os recomendamos esta excursión con todo incluido: Transporte, comida y entrada. Una manera perfecta de visitar el Mont Blanc en un sólo día sin complicaros la vida.
¿Dónde aparcar?
Una vez llegamos al teleférico del Mont Blanc, veréis que hay un aparcamiento de pago justo en la misma puerta que cuesta 2€ la hora. Pero ojo si queréis ahorrároslo nosotros encontramos un parking GRATIS a menos de 300 metros a pie.
Se trata de una explanada justo antes de llegar al teleférico, concretamente aquí: Courmayeur Mont Blanc Funivie. Además desde la carretera se ve una pista de aterrizaje de helicópteros, así que no tiene pérdida.
¿Cuánto cuesta la entrada?
Las entradas para el teleférico del Mont Blanc puedes comprarlas tanto en la taquilla como a través de la página web. Nuestra recomendación es comprar en la web para no quedaros sin plaza y además sale más barato! Cuando llegamos vimos que en taquilla costaban 59€ comparado con los 55€ que nos costó en la web oficial de Skyway Monte Bianco.
El proceso de compra de entradas por la web es sencillo. Una vez realizada la compra te envían al email un código QR, que permite acceder al teleférico directamente.
Las cabinas del teleférico al Mont Blanc tienen salida cada media hora. Aunque nosotros habíamos comprado las entradas para una hora en concreto, como no había mucha gente en ese momento, la chica nos permitió entrar antes de tiempo sin ningún problema.
¿Qué vemos en el teleférico de Mont Blanc?
En primer lugar tenemos que decir que el teleférico del Mont Blanc ha sido una de las experiencias más espectaculares de nuestra vida. Estar colgado de un cable entre los picos más altos de Europa es algo que no tiene precio!
La excursión se compone de dos tramos, primero paramos en el Pavillon du Mont Fréty y finalmente ascendemos hasta la estación de Punta Helbronner. Las dos estaciones cuentan con grandes ventanales donde admirar las mejores vistas panorámicas que podáis imaginar. Para muestra un botón… 😉
Como decíamos, a lo largo del trayecto tenemos dos paradas, la primera será a 2.200 metros de altitud y la segunda y más espectacular asciende hasta los 3.466 metros. Las cabinas rotan 360º a lo largo del trayecto para ofrecer unas vistas panorámicas del valle y las montañas de alrededor. Así que no os preocupéis por la posición en que os montéis en la cabina, porque todo el mundo acaba disfrutando de las mismas vistas. Simplemente os recomendamos poneros cerca del cristal y a gozar!
La estación superior, además de contar con las mejores vistas, tiene un pequeño museo geológico y un restaurante-cafetería. Lógicamente teniendo en cuenta el sitio en que está, no esperéis precios baratos… Nosotros nos tomamos una cerveza y un café con leche y nos costó 8€.
A la bajada nos paramos en Pavillón, la estación intermedia por la que antes habíamos pasado de largo a la subida. Aquí encontraréis un jardín botánico, un lago y un pequeño rocódromo donde podréis empezar hacer vuestros pinitos en la escalada. 😉
No es tan impresionante como Punta Helbronner pero las vistas al pueblo de Entrevés y a todo el valle son espectaculares. Además es un buen sitio para pasear con niños y el clima es bastante más amigable. Por poner un ejemplo, el día que estuvimos hacía -5ºC en la estación superior, con una sensación térmica de -12ºC, mientras que en Pavillón estábamos a unos 3ºC.
¿Cuánto tiempo dura el teleférico de Mont Blanc?
La ascensión tarda aproximadamente 10 minutos, y el resto del tiempo lo podréis invertir libremente. Nosotros decidimos subir directamente a Punta Helbroner, porque la chica de la taquilla nos dijo que solo podríamos estar arriba hasta las 14:00h. Una vez allí, podréis disfrutar del coloso blanco, el Mont Blanc! o NO… Eso dependerá del clima el día de vuestra visita. Para evitar perder el día, hay unas live webcams situadas en ambas estaciones que os recomendamos consultar aquí antes de subir, pero en alta montaña el tiempo es tan cambiante que tampoco os garantizará nada. Así que lo mejor es ir con la mente abierta sabiendo que en cualquier momento se puede echar encima la niebla.
El día que estuvimos nosotros había algunas nubes que nos impidieron ver al completo el Mont Blanc, aunque por suerte pudimos disfrutar del resto de la cordillera. Solo con ver la magnitud del lugar, ya merece cada euro gastado.
Una vez dentro del complejo podéis estar todo el tiempo que queráis, pero siempre teniendo en cuenta el horario del último teleférico de bajada, que en invierno es a las 15.30 desde Punta Helbronner y las 16.30 desde Pavillón.
Dónde dormir para visitar el Mont Blanc
Como os hemos contado al principio, nuestra escapada tenía como objetivo visitar el Mont Blanc y el Cervino. Por ello elegimos un punto intermedio que minimizara los desplazamientos.
Tras analizar varias opciones, decidimos alojarnos en el Village Camping Cervino, un camping ubicado al norte del Valle de Aosta, muy cerca de la estación de esquí Beuil-Cervinia, situada a las faldas del gran Monte Cervino.
Se trata de un camping principalmente de bungalós, porque el clima de esta zona no permite la acampada en tienda de campaña más allá de julio y agosto. Nosotros alquilamos un bungaló pequeño pero que tenía de todo, cocina, comedor, baño y cuarto de matrimonio. Así que estuvimos de lujo y además abaratamos costes del viaje, ya que hicimos una compra en el súper a la llegada y prepararnos desayunos, picnics y cocinar algo para las cenas.
Sin duda fue todo un acierto en mitad de la naturaleza para una escapa de montaña.
LAS MEJORES ACTIVIDADES PARA DESCUBRIR MONT BLANC
Ver el Mont Blanc por libre es maravillo, pero si tenéis la oportunidad y queréis que vuestra experiencia sea totalmente completa, os recomendamos reservar una de las actividades.
Además si reserváis desde estos enlaces estaréis colaborando en el mantenimiento de nuestra web sin que os cueste nada. Os agradecemos todo vuestro apoyo 🙂
